Movimiento Paralímpico, la lucha constante por la integración
El inicio del Movimiento Paralímpico está situado en 1888, cuando nacieron los primeros clubes para personas sordas en Berlín (Alemania). Luego de la Segunda Guerra Mundial, comenzó a desarrollarse para atender a los veteranos de guerra y los civiles que habían sido heridos.
Recién en 1948, cuando se inauguraron los Juegos Olímpicos de Londres, se realizó la primera competición para atletas en silla de ruedas: los “Juegos de Stoke Mandeville”, que más tarde fueron fundados como internacionales. Esta organización fue la antesala del primer Juego Paralímpico, realizado en Roma (Italia) durante 1960, donde participaron 400 atletas de 23 países.
Desde aquel tiempo, la cita se realizó cada cuatro años sin interrupciones, y desde 1988 se emplazó- en verano e invierno- con los Juegos Olímpicos.
Sin embargo, el Comité Paralímpico Internacional (CPI) se fundó oficialmente un año más tarde en Düsseldorf (Alemania); mientras que la Argentina logró su organización en 2003, cuando Héctor “Pocho” Ramírez dio comienzo al Comité Paralímpico Argentino (COPAR).
Actualmente, Carlos Rodríguez es el presidente del COPAR, quien debió luchar- junto a los deportistas- para la vuelta de los entrenamientos en medio de la cuarentena por el Coronavirus. Si bien hubo un decreto que habilitaba el retorno de los atletas por los Juegos de Tokio, no estaban incluidos los deportistas paralímpicos.
Para el referente, no se trata de un tema político sino de formación. La única explicación fue que los Juegos Paralímpicos empezaban tres semanas después de los convencionales. Por eso, hizo hincapié sobre la formación de las personas desde la escuela.
Después del ida y vuelta, lograron que los deportistas vuelvan a las prácticas, aunque Rodríguez sólo conversó dos veces con el ministro de Deportes de la Nación, Matías Lammens, durante todo el proceso. Para eso, el COPAR formó un protocolo general y le pidió a las federaciones que hicieran lo propio.
Por otro lado, Rodríguez señaló, en diálogo con FRECUENCIA ZERO, que la Argentina tiene 35 clasificados para Tokio 2021 (que fueron confirmados mediante la Embajada en Buenos Aires) y otros 40 tienen grandes posibilidades de sumarse. Sin embargo, resta definirse el calendario previo a la máxima cita.