La tasa de desocupación en el tercer trimestre del 2022 se ubicó en el 7,1%, 1,1 puntos porcentuales por debajo del 8,2% de igual lapso de 2021 y dos décimas por encima del 6,9% del trimestre anterior, según informó este miércoles el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Marcelo Ramal, economista, explicó que la recuperación del empleo se dio casi exclusivamente en el empleo precario, lo que implica que la posibilidad de trabajar mejora, pero únicamente en empleos que ofrecen contratos a un tiempo determinado o que permiten el fin de la relación laboral en cualquier momento.
Ahora bien, si se compara con los datos del tercer trimestre de 2021, se observa que el 34% de la población ocupada se encontraba dentro del empleo no registrado. Sin embargo, actualmente subió casi al 38%.
«Estamos en los niveles históricos más elevados del empleo precario, lo cual deja un interrogante a futuro porque el empleo precario se caracteriza por el despido fácil. Es decir, el menor síntoma de enfriamiento económico va a conducir a una rápida caída de la demanda laboral y en estas tasas de ocupación que se registran hoy. Estamos cargando otra hipoteca hacia delante», analizó Ramal en diálogo con FRECUENCIA ZERO.
Asimismo, la creación de trabajo precario impacta sobre la caja jubilatoria actual y, en adelante, cargará al conjunto de la sociedad el sostenimiento de la jubilación de las personas que no aportan actualmente.
