EL HIJO DE UN JOYERO Y SU NOVIA RAPTADOS Y LIBERADOS

El hijo de un joyero y su novia; robados y raptados

los delincuentes los interceptaron en Caballito. Para preservar su vida y la de su pareja, el joven les abrió el local. Se llevaron dinero y alhajas. Luego la pareja fue raptada y más tarde liberada.

El hijo del dueño de una joyería y su novia fueron privados de la libertad hasta la madrugada, luego que ladrones los interceptaran en el barrio de Caballito, robaron dinero de uno de los negocios de alhajas -abierto por el propio muchacho para preservar su vida y la de su pareja- y finalmente los abandonaron en Villa Soldati.

Si bien inicialmente se habló de un secuestro, técnicamente los delincuentes no llegaron a pedir un rescate, pero los familiares del joven hicieron una denuncia pidiendo investigar esa posibilidad por un llamado sospechoso que había recibido del muchacho durante el tiempo que estuvo en cautiverio.

Lo cierto es que todo comenzó ayer, momentos después de las 19 en la calle José Bonifacio al 1400, de Caballito, cuando Juan Ignacio Pereyra, de 32 años, y su novia iban en un auto Audi A3 y en un semáforo fueron sorprendidos por dos ladrones.

Fuentes policiales explicaron que los sujetos amenazaron a las víctimas con armas de fuego, se subieron al Audi y se llevaron cautiva a la pareja.

Los voceros contaron que, según le explicó Pereyra a la policía, dentro del coche los asaltantes le pidieron dinero, pero como él tenía poca cantidad encima les ofreció a los malhechores ir a la joyería de su padre para sacar algo de plata y así poder ser liberado cuanto antes.

Sin embargo, por la tarde, el abogado de la familia Pereyra, Sergio Dubove, abundó en las precisiones: «Fue un hecho casual, por el auto en el que iba supusieron que tenía dinero pero como sólo llevaba unos pocos pesos y una notebook le exigieron llevarlo a su casa. El les explicó que vivía en un barrio cerrado y que no iban a pasar los controles de seguridad».

Fue entonces cuando, entre los papeles, los delincuentes vieron que trabajaba en una joyería, «Homero», y a la víctima se le ocurrió llevarlos hasta un local situado en Rodríguez Peña y Posadas, del barrio porteño de Recoleta, donde «prestan un servicio técnico y no abundan las cosas valiosas», explicó el letrado.

«El llamó a la familia para ubicar la llave de este local que tenía la empleada», confirmó el abogado, a raíz de lo cual la hermana de la víctima hizo un llamado a la comisaría sospechando que podía pasar algo raro.

Mientras, Pereyra hijo se dirigió al negocio, desactivó la alarma y entró con los ladrones que estuvieron en el lugar revisando qué objetos de valor podrían llevarse.

Las fuentes policiales indicaron a DyN que «los ladrones comenzaron a revolver todo y así lograron sustraer unos 3 mil pesos de una pequeña oficina». Y «ante la exigencia de los ladrones, la víctima intentó abrir el acceso a la caja fuerte, donde había más dinero», pero no pudo hacerlo, añadieron.

Según dijo el abogado de la familia a la prensa, los ladrones no fueron violentos.

«Lo que hizo Pereyra fue privilegiar su seguridad y darle un final plácido, si es que podía tenerlo. Se llevaron un poco de dinero, el celular y efectos de menor valor», añadió.

La pareja fue llevada hasta la zona sur de la Capital, donde la abandonaron cerca de la medianoche cuando la policía ya buscaba a Pereyra y a su novia con la intervención del fiscal Patricio Evers, ante una denuncia de secuestro radicada por sus familiares.

Los delincuentes dejaron a las víctimas cerca de Cruz y Escalada, en la zona de Villa Soldati, y escaparon a bordo del Audi de Pereyra.

Recién hoy a la mañana, cerca de las 7, el coche fue hallado en la zona del partido bonaerense de Lanús.