NACIÓN QUIERE UN CENTRAL PARK EN LA ISLA DEMARCHI
el proyecto tiene una torre de 335 metros
UN RASTI PARA CRISTINA
De la nada saca a la luz un proyecto faraónico, tras dos años sin noticias del Polo Audiovisual, pero no cuenta con el respaldo legal.
CHOREAR AL SOBERANO
Eso si, la obra se hará en un lugar que ella misma confesó no conocer y valga como dato anecdótico, donde estuvo la primer cancha de Boca cuando aún eran unos muchachos de barrio. También es dable recordar que justo enfrente, Alberto J Armando concretó la estafa que consistió en vender plateas para un nuevo estadio xeneixe a inaugurar el 25 de mayo de 1975 y con miras a ser utilizado como sede del mundial ’78. En fin…
La fiebre de los proyectos faraónicos se explica, solía decir el Bisonte Allende; “en la megalomanía de los mandatarios y en la posibilidad de robar de sus funcionarios y de sus ejecutores” De Yaciretá para acá, ha habido muestras innumerables de afanos legalizados como lo será éste, donde un “ladrillo de barro cotiza como un lingote”, como también argumentaba el mítico dirigente del PI. Y con solo ver a los “finalistas” del concurso, es sencillo determinar que tienen un QUINI y un LOTO premiado antes del sorteo, ya que la ANSES de Diego Bossio ya aclaró que de un concurso del que nadie tenía noticias, la trifecta de los bendecidos está integrada por CPC de Cristóbal López, Irsa de Eduardo Elsztain y Riva S.A., quedando fuera Schocklender, Hebe y los otros 38 amiccis de Alí Babá.
Aunque rápido de reflejos, varios miembros del FPV salen a aclarar «que es una inversión privada», la movida le saldrá -segun ellos-, unos 500 palos verdes, que bien podrían usarse en urbanizar las villas cercanas, ya que el macrismo no piensa hacerlo y el partido oficial «está al lado de los que menos tienen».
CRISTINA DIXIT
«Hollywood ha creado una cultura cuasi universal, queremos que nuestros valores tengan ese desarrollo», dijo Cristina Kirchner en agosto de 2012 y agregó: “Debo ser la reencarnación de un gran arquitecto egipcio», sin que se le mueva un músculo.
¿EL POLO AUDIOVISUAL? MAL, GRACIAS
El proyecto quedó en la nada desde hace más de un año y en el Gobierno lo daban por archivado, ya que en ese entonces, Cristina no pudo doblarle el brazo a Hugo Moyano, que lo frenó. Entonces, el moyanista Juan Carlos Schmidt, titular del gremio de Dragado y Balizamiento, fue quien llevó la bandera contra el desalojo de unas 400 personas que trabajan en los galpones ubicados en la península. Durante meses, el gremio de Schmidt quedó en alerta luego de que Cristina firmara el decreto que autoriza la desafectación de los inmuebles de la Dirección de Construcciones Portuarias y Vías Navegables ubicados en la isla Demarchi , para que los administre una Sociedad Anónima que conformarán la ANSES y la Secretaría de Comunicación Pública.
Pero con este anuncio la presidenta volvió al ataque y redobló la apuesta asegurando que “tendrá la magnitud del Central Park».
Cristina pronosticó que el Polo Audiovisual convertirá en «el símbolo de la Ciudad, por su originalidad, creatividad y colores» y que constará de un edificio que, con una altura de 335 metros, será «la torre más alta de Latinoamérica», detrás del Chrysler Building y el Empire State, de Nueva York.
La presidenta anunció además que la obra estará a cargo de Riva S.A., por lo que Cristóbal López y Elsztain quedaron en el camino.
¿Y EL PERMISO DE OBRA?
El deseo de Cristina de crear un Central Park en la ignota Isla Demarchi, ya tiene un impedimento legal: el proyecto no cuenta con la autorización de la Legislatura porteña.
A fines de 2012 se cayó la ley que rezonificaba los terrenos de la Isla Demarchi para permitir su urbanización. Es que según el Código de Planeamiento Urbano la zona que quiere utilizar Cristina para construir la torre más alta del país para desarrollar un Polo Audiovisual está catalogada como “distrito industrial uno” y sólo puede utilizarse para instalar industrias que exijan estar separadas de otros distritos, por los niveles de contaminación sonora o emisión de gases.
El cambio de zonificación sólo lo puede aprobar la Legislatura porteña, que no pudo hacerlo a fines de 2012, cuando el kirchnerismo y el PRO pactaron un grueso paquete de leyes.
Sin embargo, eso no impidió que el Gobierno nacional avanzara con la licitación del Polo. Ahora, Cristina deberá enviar un nuevo proyecto a la Legislatura justamente cuando en el PRO ya no saben con quien deben interactuar, puesto que la presidenta de la bancada K, Gabriela Alegre, se le desmadró el bloque.