En los últimos meses, los vecinos de los barrios Palermo y Villa Crespo se mantuvieron alerta y a la expectativa de lo que puede ser una transformación absoluta de la fisonomía del lugar: es que se aprobó un proyecto para construir el microestadio Arena para 16 mil personas en el predio del Club Atlético Atlanta y promete generar una revolución en la zona.
Mónica Yemayel, periodista de investigación, realizó un seguimiento del caso y llegó a la conclusión de que «la verdadera problemática es la falta de un diseño integral de la Ciudad»: «Los vecinos pensaban que se estaba construyendo un estadio cerrado para deportes, pero finalmente se enteraron que iba a ser un estadio para recreación y espectáculos y se habla de una cifra de 100 al año», relató.
¿Dónde está el origen del conflicto? Tras múltiples fracasos de ser aprobado el proyecto para construir la mole de casi 50 mil metros cuadrados tuvo múltiples fracasos en la Legislatura, finalmente en 2017 se aprobó la ley 5.874, que autorizaba la ampliación de la Sede Social y la construcción de un Miniestadio que finalmente terminó siendo un Microestadio. Justamente, el Código de Planeamiento Urbano que regula las edificaciones no define la situación del emprendimiento del Club: «La ley tiene grises y excepciones, y cuando hablamos con la Defensoría del Pueblo nos dijeron que no podían hacer nada, el problema no solo es ambiental, sino también social», explicó Yemayel.
Pero el factor que más llama la atención tiene que ver con que la gestión larretista, con fuertes influencias y aspiraciones a ser una ciudad globalizada, como Nueva York, Berlín o Madrid – que construyen nuevos estadios alejados de las zonas urbanas- el proyecto que cuenta con el apoyo oficial y es impulsado por el monopolio mediático La Nación, tiene como principal contracara que estará en una zona muy concurrida de la Ciudad. Según especialistas, los impactos socio-ambientales transformarán al barrio apacible y con poco tránsito en un sitio repleto de ruido y gentío: «si tan solo el diez por ciento de los asistentes a un evento que convoque a dieciséis mil personas llevara su auto, llegarían al barrio mil seiscientos automóviles al menos tres veces por semana, según la grilla anunciada», revela la nota publicada en Revista Anfibia bajo el título «No dormirás más en Villa Crespo».
Pese al interés del club en llegar a puerto firme con este proyecto, la periodista hizo hincapié en no enfrentar a Atlanta con los vecinos: «Es un tema muy complicado, ya que los clubes de barrio tienen una presencia muy importante, no se trata de Atlanta si o no, sino de como se hace para que el club, con su impronta centenaria, no complique a los vecinos que ya de por si, vieron devaluada su vivienda por los futuros movimientos en la zona», concluyó Yemayel.