Ley de residentes y concurrentes: paro en los hospitales porteños
Con 34 votos positivos y 5 abstenciones, la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires aprobó ayer un nuevo “Régimen de Residencias y Concurrencias en equipos de salud” del sistema público distrital. En medio de esto, la Asamblea de Residentes y Concurrentes CABA se movilizó al Parlamento para rechazar su avance.
«Lo que pasó fue súper grave. Nos reprimieron con palazos, gases lacrimógenos, cuando nos manifestábamos de forma pasiva», detalló Leandro Gómez, residente de Pediatría del Hospital Penna, sobre lo ocurrido con la Policía de la Ciudad, mientras se desarrollaba la sesión ordinaria. «Los legisladores que salieron a ver qué estaba sucediendo, que eran de la oposición y estaban en contra de la ley, no los volvieron a dejar entrar y votaron sin votos opositores, así que es un avallasamiento a los derechos y la Constitución», afirmó.
Por esta razón, la Asamblea decidió un paro de forma indeterminado, reclamando la derogación de la normativa. Sumado a esto, los residentes y concurrentes decidieron movilizarse por Callao y Corrientes, pleno centro porteño, para manifestar el disgusto.
Según Gómez, se trató de forma «exprés» e «inconsulta con los verdaderos trabajadores». Si bien planteó la necesidad de cambios en la ley, aseguró que el nuevo régimen «nos precariza más de lo que estamos precarizados en la salud pública argentina».
En contraposición, la ministra de Salud de la Ciudad, Ana María Bou Pérez, sostuvo- en su cuenta de Twitter- que propusieron «reformular la ley de residentes originada hace 30 años por una nueva más moderna, acorde a las necesidades de los profesionales residentes que acceden al sistema».
Sin embargo, el residente expresó: «La ley que se aprobó ayer legitima un trabajo esclavo: con 64 horas semanales del médico residente trabajando; guardias de 24 hs. como días de capacitación continua e intensiva; trabajo no pago de los concurrentes; nos saca cómo se calcula el salario: era un porcentaje de los médicos de planta y ahora no dice nada; no habla si vamos a percibir un aguinaldo».