La Corte Suprema de Justicia falló a favor del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires con respecto recurso de amparo presentado por el Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, contra el Decreto que suspendía la presencialidad en las aulas en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
El máximo tribunal favoreció a Larreta por unanimidad, salvo la jueza Elena Highton de Nolasco, que se abstuvo. Por su parte, el presidente de la Corte, Carlos Rosenkrantz, advirtió que ir o no a la presencialidad escolar en la Ciudad era decisión del distrito y no de la Nación.
Asimismo, los magistrados Horacio Rossatti y Carlos Maqueda resaltaron que el Estado Nacional había invadido una jurisdicción ajena sin una justificación.
Por su parte, durante un acto en el partido de Ezeiza, el presidente Alberto Fernández aseguró que había una decrepitud del derecho hecha sentencia, y confirmó que seguirá con el cuidado «de las vidas de los argentinos», por más de que se escribieran fallos. En ese sentido afirmó que las medidas buscaban preservar la salud y no complicarle la vida a la población.
En esa línea, a través de su Twitter, la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, advirtió que había un golpe de parte del Poder Judicial contra las instituciones democráticas elegidas por el voto popular.
Además, en otra parte de hilo de tweets, la funcionaria recordó que la Cámara en lo Contencioso Administrativo Federal suspendió la vigencia de la medida que suspendía los aumentos en las telecomunicaciones, y señaló que la Corte había decidido que el Poder Ejecutivo no tenía «competencias para tomar medidas sanitarias en plena pandemia y con más de 65.000 muertos en Argentina». En consecuencia se preguntó si para gobernar no era «mejor» postularse para un concurso en el Consejo de la Magistratura o que el presidente designara a un ministro de la Corte.
No obstante, en diálogo con el sitio parlamentario.com, el jefe de la Comisión de Educación de la Legislatura de la Ciudad, Gonzalo Straface, recalcó la Nación no podía estar por encima de la autonomía de las provincias para decidir sobre su educación.
También, el líder del bloque Vamos Juntos, Diego García Vilas, remarcó que el máximo tribunal había respetado la independencia del distrito. En ese sentido, el diputado porteño Claudio Romero resaltó que el documento estaba «en favor» del diálogo y de las medidas constitucionales.
El pasado 9 de abril, el mandatario nacional decretó, entre otras medidas, la suspensión de la presencialidad en los colegios hasta el 30 de abril. Luego prorrogó las medidas hasta el 21 de mayo. Tras los anuncios, Larreta recurrió al Poder Judicial con el argumento de que se irrumpía en la autonomía del distrito, y confirmó que las clases seguirían tal como estaban, pese a que la Justicia Federal había revocado a un documento de la Cámara de Apelaciones local que lo habilitaba.
En consecuencia, Fernández lo acusó de haber cometido el delito de desobediencia, y apuntó que la Ciudad había vacunado al 14% de los docentes. En respuesta, el gobernante porteño remarcó que el Gobierno había prometido que habrían 20.000.000 de vacunas en febrero.
Sin embargo, el pasado 30 de abril, a la espera del fallo final, el líder del Ejecutivo de la Capital anticipó que habrá concurrencia en el nivel inicial, bimodalidad en la secundaria y virtualidad en los universitarios, aunque nunca hubo una presencialidad completa.
En las últimas 24 horas, el distrito reportó 1.747 positivos y 60 fallecidos por el coronavirus, y sumó 345.170 infectados y 8.255 muertos desde el comienzo de la enfermedad. La ocupación de camas graves de terapia intensiva se ubicó en el 83,8%. También, se testearon 33.125 personas, lo que dio una contagiosidad del 27,1%. Además, el Monitor Público de Vacunación informó que, de las 922.419 dosis recibidas, el distrito había aplicado 819.962. También, la cuenta de Twitter Cuántas Vacunas, que transforma los datos oficiales a porcentajes, registró que el municipio inoculado al 21% de su población.
