El detrás de escena de la derrota del gobierno en Diputados

La Cámara de Diputados asestó un nuevo golpe al gobierno de Javier Milei al rechazar de manera contundente los vetos presidenciales a la ley de emergencia pediátrica y de financiamiento universitario. La oposición alcanzó con holgura la mayoría especial de dos tercios y ahora las insistencias pasarán al Senado, donde también se descuenta un revés para el oficialismo. La derrota parlamentaria expuso las dificultades del Ejecutivo para sostener apoyos propios y aliados en un escenario cada vez más complejo.
En diálogo con FRECUENCIA ZERO, Leandro Bravo, periodista acreditado en el Congreso, remarcó que la sesión reflejó “una nueva derrota” del Gobierno, que ya acumula más de 50 reveses en lo que va del período ordinario. Según explicó, el oficialismo “perdió votos propios y de gobernadores que hasta hace poco lo acompañaban”, lo que deja en evidencia la fragilidad de los acuerdos políticos que La Libertad Avanza intentó sostener en la Cámara baja.
Bravo destacó que la presión social también jugó un rol determinante, con una multitud movilizada en las afueras del Congreso para respaldar la continuidad de las leyes. A pesar de los intentos del flamante ministro del Interior, Lisandro Catalán, de asegurar los votos mediante negociaciones con mandatarios provinciales y el reparto de fondos discrecionales, el resultado fue adverso. Incluso, varios legisladores aliados, como los de Misiones y Mendoza, acompañaron la insistencia opositora, marcando un quiebre respecto de la estrategia oficial.
El periodista también subrayó la implosión del PRO en la Cámara Baja, con fuertes tensiones internas que se hicieron públicas durante la votación. El cruce entre Cristian Ritondo y Silvia Lospennato, que decidió acompañar las leyes, puso en primer plano las diferencias dentro de la bancada que había sido el socio más firme del oficialismo. “Ya no hay una adhesión ciega a La Libertad Avanza”, señaló Bravo, quien consideró que este escenario anticipa un Congreso con mayor protagonismo opositor y un gobierno cada vez más condicionado en el terreno legislativo.




