En las próximas semanas, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, junto a organizaciones sociales y diversos organismos, pondrá en marcha la mesa de trabajo que definirá la metodología e implementación del censo anual de personas en situación de calle, que iniciaría el primer cuatrimestres del año y está dispuesto por la Ley 3706.
«Actitudes de este tipo nos hace pensar que es un primer paso para tomar de manera seria la problemática», afirmó Rosario Fassina, socióloga y coordinadora del programa Derecho a la Ciudad de la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ).
Es que los censos realizados por las organizaciones en 2017 y 2019 arrojaron miles de personas más que los datos estatales. El último dato oficial- registrado hace dos años- marcó 1100 ciudadanos en situación de calle, mientras que el trabajo popular señaló 7200.
Según la referente; el acuerdo, firmado hace un mes, discutirá metodologías y mejorará las herramientas para tener un diagnóstico certero, así llegará el momento de pensar políticas integrales y no sólo de emergencia, como subsidios o paradores. Además, se abordará un análisis cualitativo para entender el trasfondo de cada situación.
Luego de un año sin estadísticas por el Coronavirus, Fassina espera un incremento por la crisis económica y social. «La pandemia puso de relieve las desigualdades estructurales a nivel país, no solo en la Ciudad. Gente que vive en situación de calle, en villas y asentamientos, o alquila, vieron recrudecer las desigualdades que enfrentan día a día», cerró.
